Los niños pequeños aprenden a conocer el mundo al observar a los adultos que forman parte de su vida. Lo mismo ocurre con los niños mayores y los adolescentes.
Megan Miccio, una profesional sanitaria de la escuela secundaria Thomas Jefferson de Denver, dice que los adultos pueden ayudar a los adolescentes de su entorno a lidiar con el estrés, y a evitar el uso de sustancias nocivas para afrontarlo, si hacen dos cosas importantes: 1) hablar sobre el consumo de sustancias psicoactivas [enlace al artículo sobre cómo hablar con los adolescentes sobre el consumo de sustancias psicoactivas] y 2) actuar como modelo de estrategias de afrontamiento saludables [enlace al artículo sobre estrategias de afrontamiento saludables].
A continuación se presentan algunas maneras de enseñar comportamientos saludables al ponerlos en práctica usted mismo:
Mostrar hábitos saludables
Los adolescentes ven cómo sus padres y tutores resuelven las numerosas exigencias que les plantea la vida. Pero los padres se han enfrentado a un exceso de estrés en los últimos años, así que es posible que sientan que no han sido modelos de cómo aliviar el estrés de manera saludable. Es comprensible, y usted no está solo. Preste atención a los pequeños cambios que puede hacer a lo largo del tiempo, e invite a su hijo a acompañarlo.
Hable de sí mismo
Puede ser natural que los padres o tutores protejan a los adolescentes de las malas noticias, o que se centren en lo que ocurre en el mundo de los adolescentes cuando hablan con ellos. Megan sugiere que también hable de las cosas difíciles de su día: ¿qué fue lo más problemático? ¿Qué obstáculos tuvo que superar? Hablar sobre el proceso para afrontar las dificultades puede dar lugar a conversaciones sobre comportamientos positivos.
Manténgase disponible
Al establecer límites, puede ayudar a demostrar cómo controlar las diversas partes de su vida que exigen su atención y facilitar las conversaciones con los adolescentes. Busque momentos en que pueda dejar a un lado su teléfono para limitar las interrupciones con su adolescente, y hable de actividades positivas que pueden hacer juntos para reducir el estrés. Y cuando surja una conversación difícil, ponga en práctica la buena capacidad de escuchar