No son solo los grandes gestos los que pueden marcan una gran diferencia en las vidas de tus hijos. Las pequeñas cosas tambien cuentan.
Incluso cuando no se comporten de esa manera, los adolescentes quieren padres y gente que los cuide que continuen esforzándose por conectarse con ellos.
Recuerda que ellos podrían tener miedo a pedirte ayuda — especialmente si tienen un problema o han cometido un error y necesitan tu apoyo. Acercárteles y dejarles saber que, estarás presente para ayudarles porque te importan, sin duda hará que se te acerquen más en el futuro.
Aquí hay algunas ideas de ciertas cosas pequeñas que puedes hacer para conectarte mejor con tu hijo adolescente:
- Escucha activamente sus historias
- Establece contacto visual con ellos
- Felicítalos por su pasión por un tema y hazle más preguntas sobre eso
- Elógialos por algo que hayan hecho bien
- Dales un abrazo
- Déjales saber cuándo fueron ellos los que te enseñaron algo nuevo
- Pregúntales por su canción favorita o su opinión de una película
- Mantengan los televisores en áreas comunes en lugar de los dormitorios
- Di “te amo” — más seguido
- Brinda explicaciones para las reglas o límites que establezcas
- Tengan un pasatiempo familiar
- Asume que tu hijo adolescente quiere una conexión contigo — incluso durante los días difíciles
- Recuerda que cuando sientan enojo, frustración o miedo estará bien y es normal y que tú estarás allí para ellos
- Envíales un chiste por texto
- Ayuda a que tu hijo adolescente pueda ponerles nombres a sus emociones, pero no trates de solucionarle sus problemas
Aquí hay algunas ideas más que hemos escuchado directamente de padres de Colorado cuando les preguntamos qué cosas pequeñas habían aprendido a hacer para conectarse mejor con sus hijos adolescentes:
- “Una de mis cosas favoritas es que implementamos los domingos sin celulares”.
- “Darle la oportunidad a mi hijo de hablar sabiendo que no lo voy a interrumpir con lo que pienso o con ideas en cuanto a lo que debería hacer o lo que yo crea que pudo haber pasado. Y eso hace que él se abra más a querer compartir”.
- “En algún momento te tocará escuchar muchas respuestas de una sola palabra. Pero luego haces la pregunta correcta y esa es la que te da respuestas de más de una palabra. Y más tarde sigo elaborando a partir de ese momento. Me permite saber cómo seguir luego”.
- “Me aseguro de que mi hijo sepa que aquí estoy para él, y que cuando esté listo para hablarme, no lo voy a juzgar. Aunque en mi mente, estoy muerto de miedo y temo juzgarle, pero no quiero que él sepa eso”.
- “Hay muchísimas presiones y diferentes cosas a nivel de sociedad que están pasando en las escuelas, yo trato de ser consciente de eso y respetarlo”.
Recuerda: Al tomar pasos pequeños, le estás dejando saber a tu hijo adolescente que te importa y que pueden depender de ti. ¡Todas estas pequeñas acciones tienen un gran valor para ellos!